Al caer el sol, finalmente llegó aquel suspiro foráneo anunciado por las aves, trayendo las nubes del agua, armonizando la noche, abrazando la tierra, despertando las luciérnagas que se creían perdidas, haciendo girar la rueda olvidada. El barro se rebela contra las huellas, palabras y juveniles escrituras que creímos inmortalizar en las calles durante nuestros años dorados. Ahora los caminos se empiezan a desdibujar y llevan a infames rincones donde lo más horrible ocurre a cada momento sin que nadie lo vea. La oscuridad se adueña de la zona y es necesario pagar un tributo para poder transitar seguro por sus extensos dominios. Unos ofrecen sus alas a cambio del bienestar de sus hijos, existen aquellos que realizan frenéticos rituales de sangre sacrificando a sus propios hermanos, algunos entregan lentamente su cordura mental cayendo finalmente en la desesperación, otros huyen sin mas. Los insectos se mantienen expectantes a cada cambio en la zona y se sabe que conspiran con las plantas para poder obtener todas las ventajas posibles. Se dice que las rocas conocen secretos que nadie mas podría siquiera sospechar, y es por eso que solo observan y esperan. Los animales hacen guardia constantemente, en sus entrañas hay algo que los mantiene alerta. Nosotros seguimos con nuestra vida cotidiana, de vez en cuando nos preocupa lo que le sucede a una celebridad televisiva . La rueda esta próxima a concluir su giro.
